¿Puedes confesarlo? ¿Alguna vez te has sentido atrapado por las redes sociales? ¡Entonces ten cuidado! Observar cómo los demás disfrutan y compran cosas perfectas, casi siempre es una trampa.
En un mundo donde todo está a un clic de distancia, el FOMO financiero es real y afecta nuestra economía.
Cada notificación y publicación puede causar ansiedad y llevar a compras impulsivas.
Esto nos lleva a un ciclo infinito de insatisfacción por falta de manejo emocional.
Como consecuencia, siempre en busca de emoción y de la sensación de estar ganando algo, muchas personas invierten sin un plan o ni siquiera pueden ahorrar porque están desperdiciando todo en adquisiciones fútiles.
Comprender el FOMO financiero es fundamental para no permitir que las redes controlen nuestros gastos y el futuro.
Entende qué es el FOMO financiero y su efecto psicológico
FOMO, es un síndrome sobre el “miedo a perderse” o “quedarse fuera”, de oportunidades financieras. Esta comprensión es muy importante en las finanzas personales para evitar compras impulsivas y elecciones perjudiciales para las finanzas.
En cuanto a inversiones, el FOMO es muy responsable de la toma de decisiones emocionales en lugar de racionales.
FOMO y su relación con las finanzas
La presión por seguir las tendencias puede llevar a la impaciencia y la codicia. Como resultado, muchos inversionistas inexpertos pueden apostar por la compra de activos a precios elevados, aumentando los riesgos de pérdida.
La presión social y la inseguridad financiera pueden intensificar la ansiedad y hacer que las personas ignoren estrategias a largo plazo.
Efectos del FOMO en el comportamiento del consumidor
Otro efecto común es la pérdida de la noción sobre gastos superfluos. La influencia de la multitud puede hacer que muchas personas olviden su propia personalidad y afecten decisiones de compra.
Si crees que esto no te pasaría a ti, trata de recordar si alguna vez compraste una prenda de ropa solo por la moda o si ya gastaste dinero en un producto sin realmente reflexionar si era necesario.
Ansiedad y FOMO casi siempre son una dupla
La ansiedad va de la mano con el FOMO y esto puede crear un ciclo destructivo que afecta la estabilidad financiera.
Aquí, tenemos que tener una mirada aún más cuidadosa sobre las nuevas generaciones que han sido especialmente más afectadas por este problema.
Pero es un problema moderno y generalizado que puede afectar la salud mental y financiera en cualquier rango de edad.
Impacto de las redes sociales en el FOMO financiero
Internet cambió la forma en que interactuamos con el mercado. Ahora, la influencia de las redes sociales afecta totalmente nuestras decisiones de compra. Esto puede llevar a gastos excesivos y, no raramente, al endeudamiento.
Es fundamental comprender cómo el FOMO financiero se intensifica debido a estas plataformas.
¿Cuántas horas al día pierdes en el celular? ¿Cuántas veces eres impactado por anuncios? Empieza a prestar atención en cómo las propagandas han acompañado tu deseo de compra casi en tiempo real.
El poder de los “influencers” en las decisiones de compra
Influencers son una nueva profesión en este universo digital y como su propio nombre lo sugiere, tienen un fuerte atractivo publicitario que influye en compras de productos y servicios.
El marketing de influencia tiene mucho poder de persuasión gracias a la sensación de confianza que alguien real pasa al público que lo sigue.
Sin embargo, esta “psicología del comercio” puede crear una cultura de consumo descontrolado.
Muchas veces las personas son convencidas de comprar cosas que en realidad no necesitan tanto así.
Redes sociales como impulsoras de compras por impulso
Plataformas como Instagram y TikTok facilitan la compra directamente desde ellas. Por eso, el FOMO financiero en estas plataformas puede ser más peligroso y crear un ciclo de gastos descontrolado.
Los consumidores muchas veces compran solo para no sentirse desconectados de las tendencias. Esto hace que el efecto del FOMO financiero sea aún más fuerte.
FOMO financiero: Generación Z y su comportamiento de gastos
La Generación Z, nacida entre 1997 y 2012, presenta un comportamiento de gastos influenciado por las redes sociales. Esta generación tiene un poder de compra superior a 143 mil millones de dólares. El interés en hacer compras en línea creció, principalmente con la pandemia, dedicando más tiempo a estas actividades.
Las redes sociales se transformaron en piezas fundamentales para descubrir nuevos productos y marcas. Consecuentemente las compras con origen en esas plataformas solo crece.
Tendencias financieras en las redes sociales que afectan a los jóvenes
Trends virales como “matemática femenina” y “gastos condenados” impactan a la Generación Z. Ellos consumen contenido en YouTube, Instagram y TikTok. 77% de ellos usan el comercio en línea para descubrir nuevos negocios y 80% esperan descuentos antes de comprar y esto genera la expectativa por ofertas.
Es común preferir compras que reflejen sus valores sociales y políticos, en ese sentido, la internet se torna un ambiente propicio.
Conexión entre incertidumbre y FOMO financiero
La inseguridad del escenario económico aumenta aún más el FOMO financiero en la población.
Muchos crecieron en hogares con presupuestos ajustados, que los lleva a buscar gratificación instantánea en las compras superfluas.
Algo entre 80% de las decisiones de compra son emocionales. Muchas personas admiten que gastan impulsivamente debido a promociones artificiales y miedo a la escasez.
Esto muestra cómo el FOMO financiero puede llevar a decisiones lamentables.
Estrategias para evitar el FOMO financiero y gestionar mejor tus finanzas
Para combatir el FOMO financiero, tener una mentalidad consciente de gastos es fundamental.
Esto no solo controla los impulsos, sino también gestiona el riesgo emocional, que es vital en las decisiones del día a día. Aquí damos algunas dicas y herramientas recomendadas!
Dicas para gastar de forma consciente en las redes sociales
Desactivar notificaciones innecesarias es un buen comienzo. Además, es útil seguir solo cuentas que promuevan ahorro e inversión. Esto mantiene el foco en las metas financieras de corto, mediano y largo plazo.
Establece un presupuesto mensual y cúmplelo. Reflexiona antes de comprar algo impulsivamente, preguntándote si lo necesitas. Busca contenidos educativos sobre finanzas personales en vez de consumo material.
Aplicaciones y herramientas para control financiero
Aplicaciones de finanzas personales como Monefy y Fintonic son muy útiles.
Ellos permiten que definas metas de ahorro y veas el progreso fácilmente. El uso de estas herramientas ofrece más control sobre tus finanzas, reduciendo la ansiedad del FOMO.
Considera estas aplicaciones que ofrecen:
- Registro automático de gastos.
- Alertas de gastos importantes que sobrepasan el presupuesto establecido.
- Asesoramiento personalizado con base en tus hábitos de consumo.
Conclusión
El FOMO financiero y las redes sociales son un gran desafío, especialmente para los jóvenes.
Ellos pueden llevar a la toma de decisiones rápidas y al inversión sin pensar. Esto generalmente aumenta los riesgos, sin dar mayores chances de ganancias.
Es crucial comprender cómo el FOMO financiero afecta nuestras finanzas. Esto nos ayuda a ser más conscientes con nuestro dinero y proteger el equilibrio mental.
El FOMO nos hace cambiar rápidamente las estrategias de inversión. La ansiedad de no perder oportunidades lleva a actuar por miedo.
Por tanto, aprender sobre finanzas y tener objetivos claros es lo que va a guiarte por un camino seguro.
Con las estrategias correctas, podemos resistir al FOMO y construir un futuro económico fuerte.